Los candidatos pueden tener diferentes personalidades. Detéctelas y sepa si vale la pena contratarlos.
Ver las cualidades y la experiencia de una persona a través de un currículum es muy distinto a verlo de forma personal porque las percepciones cambian al descubrir que detrás de un hombre responsable y que alguna vez se desempeñó en prestigiosas empresas, se puede transformar en una persona "distante" y de poca comunicación.
Por ello, los expertos son enfáticos en decir que los procesos de selección deben ser para todos igual, y no basta sólo con tener estudios y buenas recomendaciones, por lo que es preciso trabajar con aquellas personas que se amoldan de mejor manera al puesto y a la empresa.
Esta es una de las grandes ventajas que ofrece la entrevista personal, sobre todo, en lo que respecta al conocimiento de la personalidad de quien postula a un puesto en la empresa. A continuación, un listado de las características de posibles candidatos que pueden presentarse en una entrevista de trabajo:
El ausente
Aquel que no acude ni el día ni la hora citada a la entrevista de trabajo, en definitiva el candidato que no da señales de vida.
El desinformado
Existen algunos candidatos que asisten a las entrevistas sin siquiera haber leído los requisitos necesarios para optar al cargo. Estos significan en términos prácticos, una pérdida de tiempo.
El mentiroso
Aquel que al enviar su currículum a la empresa se vende como el "mejor", pero en la entrevista, que es cuando se comprueba la veracidad de los datos, se demuestra que ha mentido.
El insistente
Hay quienes quieren formar parte de una empresa concreta y piensan que cuantas más veces envíen su candidatura más posibilidades tienen. La verdad es que no es así.
El rumiante
Aunque parezca mentira, muchos acuden a la entrevista mascando chicle durante toda la entrevista y hasta de vez en cuando hacen pompas pareciéndoles de lo más normal.
El telefonista
Se trata de aquella persona que mientras realiza una entrevista de trabajo deja el teléfono encendido y suena con la música más llamativa que encontró, y lo que es peor, atiende la llamada.
El candidato 'como Pedro por su casa'
A una entrevista de trabajo debe acudirse con traje y corbata en el caso de los hombres y de traje para las mujeres. También dependerá del puesto de trabajo al que postulemos, ya que en determinados perfiles no es necesario acudir vestido tan formal para realizar la entrevista de trabajo. No obstante, existen postulantes que no advierten estos requisitos sociales, por lo que acuden de manera informal, como suelen vestir a diario los fines de semana.
Fuente: Blogderrhh
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